El día domingo a las 6,45 am, se abrió la reja de CDP de Lebu, José salía junto a otros presos en una libertada medias, pero libertad. Dos amigos lo esperaban fuera del penal. En un auto su madre y hermanos esperaban en silencio. En una esquina lo esperan amigos de Santiago, está oscuro, y no hace nada de frio, minutos más tarde llegamos nosotras, con más amigos, y nuestros wenu foye, los llafllaf, y los retrufoye. No vamos solos, llevamos el newen de nuestra gente…

Abrazos, besos, calor, alegría inmensa, tristeza, tantas emociones retenidas… tanto tiempo perdido y recuperado en un segundo viéndolo parado en esa esquina, fuera de esa cárcel fría y triste.

Nos vamos todos caminando hacia la cárcel, de vuelta, hacemos llellipun para pedir que no vuelva allí, que salga pronto, él y los demás. No dejamos nada botado, ni una sola hoja de foye tirada, ni una gota de muzay sobre el cemento.

Nos vamos al mar, a continuar nuestra misión, limpiar a José, y renovarlo de energía. El mar se abre majestuoso, nos recibe, como si estuviese feliz. Parece un abrazo cálido de un hermano.

La ceremonia comienza con las 6 banderas plantadas y todos los retrufoye que llevamos. Muzay, murke, kako, y nuestra oración. La lamgen machi pide x José, x su compañera machil, x la familia, x los presos, agradece tenerlo de vuelta, y solicita que lo mejoren.

El mar recibe las ofrendas, suavemente limpia nuestros pies y manos, la ropa de José, se lleva todo… incluso mi angustia y ese odio queme comía.

Nos vamos a choke, en los pocos autos que nos acompañan, abarrotados de newen, alegría, y feyentun. Llegamos tocando bocinas, para que sepan que vamos, que hay uno más libre, que no pudieron quitarnos nuestra libertad, que los sapos escuchen que no lo lograron, esta de vuelta uno de los que les cagaron la vida, con su traición. A pesar de esto el espíritu de José siempre fue libre, siempre estuvo en el wallmapu, siempre estuvo en choke. Fuimos al nguillatuwe, a devolverles su hijo a los ngen por los que dieron la pelea en esos años, x el territorio q fueron encarcelados. Nuevamente hacemos llellipun. Y es como si nunk se hubiese ido de allí…

Pero la invasión forestal es devastadora, duele caminar x ahí, duele ver las heridas en la tierra, duele ver cómo nos roban nuestros pocos espacios, duele ver la razón x la que fueron encarcelados. Para que los ricos avancen en su rikesas, y a nosotros nos hundan en la miseria. Nos arrebataron la libertad por unos pinos, por un dictador y torturador, por un fiscal corrupto e inmoral. Por amar la vida, la libertad, la tierra que pisamos, el aire que respiramos.

Nos quitaron nuestras familias y no lo lograron, aquí estamos… como el primer día de estos tres años, a tu lado, en las buenas y en las malas… en todo momento, lo conseguí, te sacamos de allí. Te tenemos de vuelta a medias, pero estarás pronto junto a tus hermosas hijas, a tu familia que te ama. Y la gente que te admira y respeta.

Quise abrazarte y decirte mil cosas cuando te vi afuera y no pude, no me sale tanto dolor y alegría juntas… Te me llevaron, te me robaron… y estas de vuelta… como el viento, suave y fuerte como toda la vida has sido.

Eres un orgullo para mí, eres un orgullo para la nación mapuche, tus hijas te aman y respetan, te acompañaremos hasta el final.

Fue un hermoso día…

Grax a todos quienes colaboraron en este proceso, y en todo, desde el apoyo moral hasta los gestos de solidaridad. A todos. Pero en especial a quienes nunk me dejaron sola… grax también a kienes me hicieron mierda, y me kisieron cortar las alas, x que me crecieron más grandes, y me hice mas fuerte aun. Sé que ya no me detendrán, la injusticia no puede continuar. Este es solo el principio, aun nos faltan dos, Ramon y jonathan, siempre, en todo momento estuvieron en nuestros corazones y oraciones. Sabemos que estarán también con los pu lonko pronto, y en libertad.

El tema del ADN continua, no nos dejaran en paz, hay que hacer sea un tema de debate entre comunidades, entre mapuches, y obligar a q sea tema nacional, y se elimine de una vez x todas, nuestro kuifi mogen no puede seguir siendo atropellado, no podemos permitir otra forma tan sucia de persecución a nuestros luchadores. Hay que seguir protestando, seguir pataleando, hasta que nos escuchen, x las buenas o las malas deben entender que somos diferentes y deben respetarnos.