Y vuelvo a caminar desnudo por las calles.
Pensando en la “nada” me entretengo en la noche.
Camino, miro y estudio.
Los gatos me acompañan, me cuidan.
Desde los pretiles me miran, yo se que están ahí cuando la luz brillante de sus ojos me muestra el camino en medio de la oscuridad.
Ambos buscamos nuestra presa, es que hemos dejado de ser animales para convertirnos en depredadores de esta sociedad enfermiza integrada por hombres y mujeres que ya ni instinto animal tienen.
Ahora somos depredadores, ya no somos animales.
Es que ambos terminamos convirtiéndonos en “eso” después de darnos cuenta que la “manada “ no es más que un conjunto de iguales a los que con el tiempo le perdimos primero la confianza y más tarde ( y por suerte) el respeto.
Ahora estamos solos.
Desnudos, un poco cansados, pero igual caminamos, firmes, olfateando, confirmando los objetivos, armando los planos de salida de emergencia en nuestros cerebros.
Noche negra.
Luz de luna.
Pasado presente y futuro que nos invitan a ir por la nada…
PALABRAS DEDICADAS A CARLA VERDUGO E IVÁN SILVA POR SU COMPROMISO CON LA VIDA…